Cuba enviará diez educadores para participar en la refundación de la enseñanza en Honduras
Fecha de lanzamiento: 13 de febrero de 2023
Diez profesionales de la educación cubanos viajarán a Honduras para participar en el proceso de refundación de la enseñanza, como parte de los acuerdos firmados entre el Ministerio de Educación (MINED) y la Secretaría de Planificación Estratégica, Educación y Cultura de ese país.
El proceso, impulsado por la presidenta izquierdista Xiomara Castro, busca elaborar un plan curricular que transforme la sociedad hondureña desde la enseñanza. “De esta manera, nuestro sistema educativo será universal, inclusivo, participativo, laico y científico. El sistema prioriza cuatro aspectos en la enseñanza: la alfabetización, el acceso universal a la educación, la importancia que tienen los profesores y la educación enfocada al cambio social”, explica un video compartido en Twitter por la Secretaría de Planificación Estratégica del país centroamericano.
Además, resalta la importancia del sistema educativo cubano, el cual considera de los mejores a nivel mundial. Así, pretenden “eliminar la discriminación social a través de la educación”, especifica el comunicado.
La Declaratoria para la Refundación de la Educación en Honduras, suscrita en octubre pasado, prevé articular organizaciones internacionales, populares, comunitarias, así como agentes no gubernamentales, la empresa privada y otros sectores de la población hondureña en la transformación de la educación de ese país.
Para ello, la presidenta se auxilió del gobierno cubano, al cual abonará unos 14 millones de lempiras —566 mil dólares— durante los tres años que dura el convenio. Además, el país correrá con gastos de alojamiento, transporte y alimentación.
Sin embargo, varios actores de la sociedad hondureña han realizado un llamado de atención contra la inclusión de profesores cubanos quienes, lejos de ser simples asesores como declaró el gobierno castrista inicialmente, se han estado moviendo por los distintos departamentos de la nación, contribuyendo al adoctrinamiento de la sociedad.
En enero pasado, el Partido Nacional de Honduras denunció la injerencia ideológica de los maestros cubanos y pidió a los ciudadanos mantenerse alertas ante cualquier intento de adoctrinamiento por parte de estos. “De forma opaca, poco transparente y con objetivos pedagógicos dudosos el gobierno socialista de Libre trajo a 120 maestros cubanos a Honduras”, comunicó la organización, que negó la necesidad de emplear a extranjeros en un ámbito que puede ser solucionado por nacionales.
“Dice el ministro de Educación que los maestros cubanos solo vienen a asesorar a los maestros hondureños, si así fuera ¿por qué se deben desplazar a los 298 municipios del país?”, cuestionaron.
Como si esto no fuera suficiente, varios pedagogos, académicos y políticos se han manifestado contra lo que consideran una “injerencia ideológica”, pues “el contenido de la malla curricular está diseñado exclusivamente por los mismos representantes de Cuba, a lo que analistas en el país han considerado como adoctrinamiento”, según reporta El Heraldo hondureño.
De acuerdo con el economista y catedrático Julio Raudales, “lo que hacen los gobiernos solidarios es tirarle bombas de oxígeno a Cuba porque saben los problemas que tiene la isla”.
“En realidad esto no es ninguna cooperación porque son servicios que el régimen cubano vende bien caros. Lo mismo que pasa con los médicos”, puntualizó, a la par que consideró que el sistema educativo de la Isla no tiene una calidad muy superior al hondureño.
Con la exportación de servicios educativos y médicos, Cuba busca recuperar uno de los rubros que más dinero ha reportado a la dictadura. Sin embargo, el sistema educativo cubano atraviesa un desmoronamiento, marcado por la profunda crisis económica, política y social, además del éxodo masivo de cubanos desde 2021.
El pasado curso escolar, comenzó con alto déficit de maestros en varias provincias, lo que obligó a reincorporar a profesionales jubilados a las aulas. Por ejemplo, de acuerdo con el diario Escambray, Sancti Spíritus necesitó traer de vuelta a 300 docentes para suplir una necesidad de mil.