Fecha de lanzamiento: 26 de diciembre de 2022

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La colombiana Xiomy Bibiany Giraldo Ramos desató la indignación de miles de cubanos al aseverar que los estudiantes de otras nacionalidades fungen como embajadores de las “bondades del comunismo” y llamar a Miguel Díaz-Canel “mi presidente”.

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Estudiante de Medicina, la joven participó como delegada al X Congreso de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), y mostró su agradecimiento con la revolución cubana por permitirle el acceso a la educación, alegando que en su país esto hubiese sido imposible.

“Estoy estudiando aquí porque en mi país no me garantizan ese derecho, porque mi futuro y suerte sería otra. Por alzar la voz, nos callan a balazos, y en Cuba he aprendido a defender con mi sangre, si es posible, a mi patria, porque aquí en Cuba se vive y se defiende la vida, la salud y la educación”, afirmó en la plenaria.

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Con sus palabras, Giraldo pasa por alto los miles de cubanos reprimidos y encarcelados durante protestas pacíficas. También olvida los cientos de jóvenes que aún permanecen en la cárcel cumpliendo condenas extremas, y el acoso a activistas y sus familiares solo por pensar diferente.

Su discurso es fácilmente desmontable si tenemos en cuenta la precariedad con la que vive el cubano, la cual, claramente, dista muchísimo de su realidad, al juzgar por las fotos que muestra en sus perfiles sociales.

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Además, Xiomy se refiere a la carrera de Medicina como una “profesión elitista” que en su país no podría cursar por falta de recursos. Si hablamos de elitismos, podríamos mencionar el sistema educativo cubano en general, que solo admite en sus filas a los adeptos al régimen.

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¿Habrá escuchado la joven hablar de la familia Miranda Leyva, cuyos hijos menores de edad debieron ser removidos de la escuela Paquito González Cueto, en Holguín, como consecuencia de los actos de repudio instigados por sus profesores, con motivo de las posturas políticas de sus padres?

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“Tahimí y Alain Michel estuvieron cuatro años y medio sin acceso a la educación, porque el 28 de diciembre de 2017, ya lo último que hicieron fue lanzarlos para la calle luego de una brutal golpiza en la escuela Julio Grave de Peralta”, denunció la familia Miranda Leyva en redes sociales.

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Para contrastar la historia de bondades comunistas podemos citar el caso de los académicos Omara Isabel y Ariel Ruiz Urquiola o Anamely Ramos, expulsados de sus centros de trabajo a pesar de validar con suficientes argumentos sus méritos científicos. Hoy, estos activistas permanecen en el exilio ante la negativa del régimen cubano a dejarlos entrar al país, con lo cual violan su libertad de movimiento y demás derechos fundamentales.

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Bajo la máxima de “las universidades son de los revolucionarios”, el joven periodista José Luis Tan Estrada fue expulsado de la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz, la cual recomendó que este fuera separado definitivamente de la enseñanza por considerarlo “una influencia negativa” para las nuevas generaciones, y sufre hoy el acoso de la Seguridad del Estado.

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¿Sabe Xiomy que jóvenes como Leonardo Manuel Fernández Otaño y Karla María Pérez González tuvieron que abandonar sus estudios luego de ser separados definitivamente del sistema académico cubano, violando así el derecho a la educación que tanto defiende?

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¿Habrá escuchado hablar del Observatorio de Libertad Académica (OLA), que a lo largo de 26 informes ha documentado decenas de violaciones a la libertad de expresión y pensamiento en el sistema educacional en la Isla? ¿Sabe acaso que los centros educacionales fungen como aliados de la Seguridad del Estado del régimen en sus intentos de silenciar la realidad cubana?

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Las palabras de la colombiana son una muestra del adoctrinamiento que exporta Cuba en cada uno de los estudiantes latinoamericanos que vienen a formarse a la Isla. Su intervención, además, ha ofendido a sus coterráneas, las senadoras del Centro Democrático, Paloma Valencia y María Fernanda Cabal. La primera compartió en Twitter un fragmento del noticiero del régimen, donde pueden verse las alabanzas de la joven al castrismo.

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“Qué tal esta joven denigrando de Colombia y alabando a Cuba frente a sus dictadores. ¿Será que no sabe lo que han sufrido miles de cubanos? ¿Será que no conoce los abusos y atrocidades de esa dictadura?”, escribió junto al video.

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Por su parte, Cabal compartió una fotografía de varias construcciones cubanas en precarias condiciones. “Así luce el comunismo. Así luce la revolución. Atraso, hambre y miseria”, sentenció.

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