Alain Lobaina Laseira
Alain Lobaina Laseira se graduó de Licenciatura en Matemática en la Universidad de Oriente, en 1996. Desde su titulación laboró como profesor en diferentes niveles de enseñanza, entre ellos secundaria, preuniversitario, politécnico y cursos de superación.
En abril de 2013, cuando impartía clases en la Secundaria Básica “Pedro Agustín Pérez”, en el municipio El Salvador, provincia Guantánamo, Lobaina envió una carta a las direcciones territoriales del Partido Comunista de Cuba y la Asamblea Municipal del Poder Popular. En la misiva, el profesor denunciaba el fraude académico en las escuelas, la falta de rigor en las evaluaciones, la pérdida de valores en la educación y las malas condiciones de los profesores.
“En el entorno de la escuela se decía que había muchos alumnos que iban a clases sin desayunar y sin buena alimentación, y que había q tratarlos más suave [disminuir la exigencia en los exámenes] (…) Los alumnos incluso están convencidos de que los profesores no pueden desaprobarlos, y con esa creencia no estudian. Todo eso está en contra de los valores en la escuela”, dijo Lobaina en una entrevista al medio independiente Cubanet (2022).
En la carta, Lobaina abogada por cambios dentro del sistema de educación, entre los cuales sugería el aumento de salario a los profesores. Además, aseveraba que esta era una situación que debería ser de conocimiento público tanto a nivel nacional como internacional.
Poco tiempo después de enviada la misiva, el director provincial de Educación, Giorvys Taquechel Román, convocó a una reunión en la Secundaria Básica con el claustro de profesores para analizar la carta de Lobaina. El directivo cuestionó algunas de las ideas expuestas por el profesor, aunque le expresó que con otras estaba de acuerdo.
“Dijo que el sistema de educación era una insignia del país y que no lo podía criticar de ese modo y mucho menos hablar de exponer los problemas a nivel internacional. Para él mi carta tenía un sentido muy político y dijo que no iban a permitir un Gorbachov aquí”, contó Lobaina al Observatorio de Libertad Académica. En la reunión, varios profesores de la escuela también cuestionaron lo que había denunciado Lobaina en su carta.
En ese momento no se tomaron represalias con el profesor, quien pudo culminar el curso escolar.
Pero en agosto, cuando recién iniciaba el nuevo año lectivo, Lobaina fue llamado por el director de la escuela a su oficina. Este le comunicó que ya no trabajaría más en ese centro y que se presentara en la Dirección Provincial de Educación para que le asignaran otra ubicación laboral.
Allí fue recibido por una funcionaria de esa institución, quien le ratificó su expulsión de la Secundaria Pedro Agustín Pérez debido a la carta enviada unos meses atrás. Las críticas y señalamientos de Lobaina atentaban contra el triunfalismo y la defensa de lo que el régimen cubano muestra ante el mundo como uno de los principales “logros de la Revolución”. En un momento del encuentro, la funcionaria le preguntó a Lobaina si era opositor.
Al final de la reunión le ofrecieron trabajar en otro centro escolar. Sin embargo, desencantado por el tratamiento que dieron a sus señalamientos y con la situación de la educación en el país, Lobaina lo rechazó y le dijo que enviaría una nueva carta a niveles superiores.